Si de algo estaba seguro Matthew McConaughey cuando terminó de leer el guión de Obsesión (Serenity) es que iba a participar del proyecto del director Steven Knight a como diera lugar.
McConaughey recuerda esa sensación de entusiasmo y adrenalina: “Recuerdo haberle escrito a Steven: “Por favor, no lo cambies. Por favor, no cambies ni una palabra”. El actor se sintió atraído por los diferentes matices del relato.
En la superficie se trata de un hombre que está obsesionado con atrapar un pez, pero por debajo yacen los temas de qué es la realidad y qué no. “Tengo que navegar por mi propia voluntad, a mi manera hasta el final de la historia. Soy el detective de mi propia vida y tengo que descubrir qué es real”, opinó.
El director Steven Knight siempre estuvo convencido de que McConaughey era el indicado para el papel: “Creo que Matthew es el mejor. Dill (su personaje) necesita ser ligeramente intensificado, más grande que la vida, tiene que ser una especie de personaje que no se delata fácilmente, alguien que está encerrado en sí mismo, y pensé que era Matthew”.
Serenity. ¿Una propuesta verdadera?
La misteriosa vida del capitán Baker Dill (McConaughey) se ve alterada cuando reaparece su ex mujer Karen (Anne Hathaway), quien está obsesionada con matar a su actual pareja y le propone sumarse al plan. Pero ¿esto será verdad?