Shailene Woodley es uno de los rostros más conocidos del cine. Está entre los talentos más prometedores de la última generación de Hollywood. Es, en definitiva, un chica de taquilla. ¿Pero qué sabemos realmente de esta célebre californiana?
Cinco aspectos de su lado menos conocido
-Ha dicho que su noche perfecta es hacer 40 minutos de yoga, tomarse una taza de té, y acostarse en su cama a leer poemas o una novela.
-En su carácter de activista, en 2016 filmó su propio arrestro por intentar impedir la construcción de un oleoducto en Dakota del Norte. La actriz literalmente interpuso su cuerpo contra las máquinas.
-Compra sus alimentos en una granja, y fabrica sus propios productos de belleza.
-Dice ser muy cautelosa con el uso de Internet. En un mundo hipervigilado, la intimidad pasó a ser un lujo.
-Desprecia los lujos, y ama vestir leggins orgánicos y camisetas hippies. ¿Qué tal?
¡Y lo más importante!
Está por estrenar nuevo film. En A la deriva (A drift), Shailene deja todo su excentricismo atrás (o no) para convertirse en Tami Oldham, quien junto a su novio Richard Sharp (Sam Claflin) partirán en un viaje a través del océano sin imaginar los peligros que encontrarán.