La película Mudbound: el color de la guerra es una “experiencia visualmente poética” que reafirma el “genio narrativo” de la cineasta estadounidense Dee Rees.
Así coincide en destacar la crítica especializada ante esta obra que cuenta la historia de dos jóvenes, Jamie (Garrett Hedlund) y Ronsel (Jason Mitchell), que regresan a casa después de la Segunda Guerra Mundial para trabajar en los campos de Misisipi.
Para Clayton Davis (Awards Circuit) “Mudbound es una obra hermosa, completamente deslumbrante a la vista y es incluso más espléndida en el alma. Un cinta exquisita digna de un Óscar que seríamos afortunados de tener a nuestra disposición”.
Adam Chitwood (Collider) destaca la reconstrucción de época en el film. “Rees utiliza el telón de fondo de la Segunda Guerra Mundial para resaltar cuánto y qué tan poco ha cambiado nuestro país en medio siglo”, argumenta.
Por su parte Jordan Hoffman (The Guardian) sintetiza “Mudbound es una rareza: una verdadera pieza coral, sin un personaje principal claro porque todos son geniales”.