La música tiene esa capacidad de transportarnos a otra realidad. Si estamos tristes, ponemos una canción para sentir ese consuelo tan necesario. Si estamos alegres, le damos play para bailar hasta que el cuerpo no pueda seguir. En esta fecha especial celebramos a todos los músicos, a los amantes de la música y, en general, a todas las personas que disfrutan de esta maravillosa forma de expresión artística.
Hagamos un repaso de varias películas que muestran el impacto que puede generar la música en la vida de distintos personajes:
Una canción para Marion: la cinta gira en torno a Arthur (Terence Stamp), un malhumorado jubilado que no puede entender cómo su mujer se empecina en avergonzarse cantando estúpidas canciones con el coro barrial, poco convencional. Sin embargo, la directora del coro Elizabeth (Gemma Arterton) ve algo especial en el reacio Arthur e intenta persuadirlo para que forme parte de su grupo. Por su lado, Arthur descubre que nunca es demasiado tarde para cambiar y, a los 70 años, por fin se atreve a liberar sus emociones y acercarse a su hijo James.
CODA, señales del corazón: la película sigue a Ruby (Emilia Jones), la única hija oyente en una peculiar familia de sordomudos. Ella divide su día entre ayudar a su familia que depende de ella para comunicarse con el resto del mundo y perseguir sus sueños como cantante amateur con ayuda de Bernardo Villalobos (Eugenio Derbez), un apasionado profesor escolar que con sus inusuales métodos de enseñanza logra sacar lo mejor de sus alumnos. Eventualmente, Ruby se encontrará en una encrucijada: deberá decidir si quiere continuar con el negocio familiar o seguir su gran pasión, el canto.
Música, amigos y fiesta: ambientada en el mundo de la música electrónica y la noche de Hollywood, un aspirante a DJ llamado Cole pasa los días con sus amigos de la infancia y durante las noches intenta conseguir un éxito que suene en todos lados.
¡Sigue conectado para más recomendaciones!
Imagen: Google
