Una familia tipo viaja por la carretera. La tensión de los vínculos poco consolidados se siente en el aire. Pero allí están, quizá un poco desconsolados, Cindy (Christina Hendricks) y su esposo Mike (Martin Henderson), junto a su hijo Luke (Lewis Pullman) y a la siempre rebelde Kinsey (Bailee Madison).
Rebeldía adolescente a flor de piel
"Kinsey es una adolescente muy feroz y original, que se siente muy desconectada de su familia, y eso es algo que desea cambiar desesperadamente", explica Madison sobre su personaje. Sus padres la llevan a un internado, pero en el camino los esperan tres extraños dispuestos a hacerles vivir su peor pesadilla.
“A diferencia de otras películas de terror, ésta no pierde el costado humano. Como actriz, me sentí identificada con el personaje”, aseguró la joven intérprete, y agregó: “quiero confesar que rodar esta película fue petrificante para mí. Soy extremadamente miedosa. Mis amigos me advertían sobre este reto. Pero estuve lista para enfrentarlo”.
El miedo obligará a la familia fracturada de Kinsey a unirse y luchar por sus vidas.
¡Próximamente en todo los cines!
